Estamos a unas horas de festejar una nueva navidad: cada año nos trae como siempre nostalgias y recuerdos.
Aquél gran regalo recibido, cenas apetitosas y emociones a flor de piel.
Al pasar los años a nosotros los que nos vamos haciendo cada días más adultos nos toca tomar la iniciativa para hacer de esta la mejor navidad para nuestros descendientes, darles los abrazos más calidos, hacer una charla agradable, tener presentes en nuestras mesas a todos los que nos quieren y a todos los que queremos.
Reciban de mi parte un abrazo afectuoso mis lectores, mis hermanos mi amor sincero y mis hijos mi vida entera.
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